Yamid Amat - "Las Cosas Que Se Tocan No Son Las Que Perduran"
30 de oct de 2024
En este episodio de "Los Hombres Sí Lloran", Juan Pablo Raba, con el apoyo de la plataforma Celia, recibe al invitado especial Yamid Amat Serna para hablar sobre la salud mental, la vulnerabilidad y la búsqueda de identidad. El podcast se centra en romper estigmas y ofrecer un espacio seguro para que los hombres exploren sus emociones.
Capítulos
Introducción al Episodio y al Invitado
Juan Pablo Raba presenta el podcast y a su invitado, Yamid Amat Serna. Comentan sobre la relación personal que han desarrollado y la temática del podcast centrada en la salud mental y la vulnerabilidad masculina.
Trayectoria y Reflexiones de Yamid Amat Serna
Yamid habla sobre su carrera en el ámbito creativo, desde la publicidad hasta la radio y la escritura. Reflexiona sobre la dificultad de encajar en etiquetas y la importancia de buscar su propia identidad en medio de la notoriedad de su padre, Yamid Amat.
Paternidad y Relaciones Familiares
Discuten sobre cómo es crecer bajo la sombra de un padre famoso y las dinámicas familiares que afectan la construcción de una identidad propia. Destacan la distinción entre relaciones y vínculos familiares.
Emociones y Salud Mental
Abordan la importancia de reconocer y expresar las emociones como hombres. Yamid comparte experiencias personales sobre cómo ha manejado las dificultades emocionales y la importancia de tener redes de apoyo.
Lecciones de Vida y el Valor del Éxito
Conversan sobre la visión del éxito y el valor personal, cuestionando las métricas tradicionales. Comparan experiencias y resaltan la importancia de buscar una vida plena más allá de lo material.
Conclusión
Juan Pablo y Yamid reflexionan sobre la importancia de abordar la salud mental y la vulnerabilidad con apertura y sinceridad. Concluyen que encontrar y aceptar la propia identidad son pasos cruciales para una vida emocionalmente saludable.
Menciones
Hola, soy Juan Pablo Raba y junto a Celia, plataforma líder en Latinoamérica para el cuidado de la salud mental y el bienestar emocional, te damos la bienvenida a Los Hombres Si Lloran. Este es un espacio seguro dedicado a explorar un tema crucial y a menudo pasado por alto, la salud mental, mientras rompemos con los estigmas y estereotipos que la rodean. Acompáñame en este viaje personal mientras yo navego por una crisis de mediana edad Y comparto el impacto que ha tenido en mi bienestar emocional Junto a Celia, cada miércoles traeremos conversaciones sinceras Con amigos extraordinarios Y entrevistas con expertos que nos ofrecerán consejos prácticos Para profundizar en las complejidades de la salud mental Y la importancia de levantar la mano y buscar ayuda Los hombres si lloran Donde la vulnerabilidad es nuestra mayor fortaleza Compadre Yamid, buenos días. Gracias por estar, gracias por aceptar esta invitación a los hombres si lloran, que es el título que le pusimos a este espacio. No tienes por qué llorar si no quieres. Si quieres llorar, pues. Ya tengo la lágrima lista. Yo creo que nosotros nos conocemos hace mucho y claramente nos conocemos además mucho por referencia. Conocemos a muchas personas en común, pero realmente ahora es que empezamos a pasar tiempo juntos, ¿no? ¿Por qué? Bueno, porque coincidimos en ciertas actividades escolares. Además de que uno puede practicar la empatía, todo lo que uno quiera, simplemente hay veces que uno se conoce con personas y el clic es automático. Entonces como que por ahí van los tiros, ¿no? Y creo que a los 10 minutos de estar hablando te dije, me encantaría tenerte en el programa. Sí, sí, sí, hermano. Un placer enorme además. Y tú me dijiste que también después tienes otra invitación para mí. Sí, exactamente. Entonces, nada, nuevamente agradecerte. A mí me sigue conmoviendo mucho que cualquier persona acepte venir aquí, a este espacio en el que hablamos de muchas cosas, pero que tenemos un énfasis en la salud mental masculina y por ende la salud mental en general. Y como decimos, la vulnerabilidad es nuestra fortaleza, y estamos aquí justamente, pues, para eso, para poder, a través de nuestra propia historia y de nuestras experiencias, simplemente tal vez hacer que la gente en general no se sienta tan sola en su propia vulnerabilidad y en sus propias emociones. Hermano, gracias, gracias por la invitación, yo te veo, te sigo porque hay una conexión rápida contigo y con los invitados porque creo que hay una transversalidad en los planteamientos hay cosas que no son de nadie es difícil decir que algo nos pertenece en la vida pero hay cosas transversales que nos hacen iguales que nos ponen en un punto de partida idéntico, donde todos los individuos nos parecemos. Entonces eso genera ganas de estar acá y ganas de seguir oyéndolos, porque hay historias muy bellas, conmovedoras, inspiradoras, sabias, ciertas, profundas. Así que yo me siento súper honrado, hermano, de estar acá. Y con respecto a lo que decías, se me vino un dibujo a la mente cuando hablabas de nuestros encuentros, que han ido siendo durante muchos años. ¿Sabes, Juan, que yo creo que la vida al final es una sumatoria de aproximaciones? Algunas veces pensamos en los encuentros, Algunas veces pensamos en los encuentros, pero cuando te detienes es lindo darte cuenta cuántas aproximaciones tuviste para llegar a un encuentro. Entonces ahí aparecen esos mundos sutiles de, por ejemplo, en esto que tú acabas de citar. Yo creo que la primera vez que yo te vi, yo debería estar escribiendo estrategias creativas para Concel y tú probablemente eras imagen de una de esas campañas. O de publicidad de algún cliente, alguna cosa así, ¿me entiendes? Y después ver cómo van siendo múltiples aproximaciones, porque todo es aproximarse. Y suceden los tiempos que son y después además ya nos vemos y hay un click. Y entonces pues maravilloso, sobre todo a través de estos temas, de estos temas que suelen ser profundos y que para mí, por las cosas que me seducen en la vida, son fundamentales. Espérate porque ya iba a empezar por un lado y obviamente ya voy a empezar por otro lado completamente diferente. A ver, espérate, acabas de decir que estabas escribiendo estrategias. Sí. Espera, espera, para qué, estabas escribiendo estrategias. Sí. Espera, espera, para qué, hasta dónde voy. Estrategias comerciales. Creativas, creativas. Creativas, ok. También antes de empezar acá, me dijiste que habías trabajado con Alejandro Marín en la W. Varios años en la radio. Varios años en la radio. Sí, sí. Sé que en este momento tienes también como otro proyecto audiovisual. Sí, producción audiovisual. Cuéntame un poquito quién, o sea, para los que no saben. Sí, producción audiovisual. Cuéntame un poquito, para los que no saben, no quién, porque aquí lo vamos a ir descubriendo, pero ¿a qué te has dedicado? Esa es una pregunta que va un poquito más allá, ¿sabes? Porque los rótulos te pueden decir muchas cosas. Yo soy un hombre que me siento incómodo con los rótulos. A mí me aprietan. Sí, las etiquetas. Como que no le encuentro el sentido a que te rotulen por lo que dice tu tarjeta de presentación, entre comillas hablo. Entonces, no, yo creo que con mucha humildad y yo provengo del mundo creativo desde muy pequeño, siempre ha existido en mí una inquietud por navegar sobre escenarios creativos y por permitirme desarrollar mis ideas, mis pensamientos, mis planteamientos en esos mundos creativos. Algunos muy provenientes de la escritura, de la filosofía, del arte, de la comunicación, evidentemente transitado por mundos periodísticos, comunicación, evidentemente transitado por mundos periodísticos, pero mucho más allá a través del querer viajar por los eslabones del mundo de la creación, es lo que tiene que ver con el arte y con los medios, digamos. Ahí hay un énfasis especial. Me di cuenta que iba creando cosas, algunas terribles. ¿Cuál es? Desde tu punto de vista, ¿cuál es la más terrible? No, digamos que no. Digamos que claro, cuando tú vas creando, vas viendo y dices, esto como que no coajo muy bien. Pero es un ejercicio. La creatividad es un ejercicio que es loable y es válido, Juan. Absolutamente necesario. Yo creo que cuando tú entras a la construcción de un personaje, estás creando un ser. Y el solo hecho de atreverte a crearlo, yo creo que tiene que hacerte sentir bien. Y en esto... Sí, pero yo sí tengo algunas que puedo decir de frente que han sido terribles. Claro, de acuerdo. No, yo también hice... Transité por la publicidad para no dejarle la respuesta abierta entonces mi primer contacto con el mundo creativo es a través de la publicidad producto de una pequeña frustración porque ni siquiera había la intención de dedicarme al mundo del arte, al mundo plástico por una u otra razón como dicen los futbolistas no no se nos dio inicialmente. Entonces, digamos que la ruta de la publicidad me conectaba con esa posibilidad de crear, de escribir. Y después ahí fui dando saltos al mundo editorial, a la revista. Siempre me ha gustado mucho escribir. Digamos que la esencia y la base de mis creaciones son escritas. Después se vuelven algunas audio, otras visuales, otras audiovisuales, otras documentales, otras columnas, otras, ¿sabes? Y entonces ahí después pasé a las revistas y después pasé a la radio, después fui a la televisión y después algo de la escritura y después al mundo documental. Y en pensamiento estratégico un poquito también, algo de marketing político, por la línea publicitaria, pero siempre en los ejes de la construcción del pensamiento creativo. Y eso me llevó a decir, bueno, yo lo que creo es que me he dedicado a crear conceptos para terceros, para mí, para mis proyectos. Y repito, unos han salido muy bien, otros han salido terribles. Pero hoy me siento tranquilo con algo que me parece que es importante. Yo creo que nosotros debemos tratarnos bien. Hay un hacha en la mano y una pluma, ¿verdad? Y generalmente le damos más uso al hacha. Estamos devastándonos permanentemente. Y hay un momento en que tenemos que hablarnos con amor y con afecto y reconocer los ejercicios que hemos llevado a cabo en la aventura de vivir entonces cuando miras y dices ok, me atreví a tener un lienzo en blanco y a crear y a crear una historia y a escribir un poema o a escribir una columna o a diseñar un formato y el resultado, sabes, Los resultados se pueden trabajar en ellos tácticamente, para mejorar, para corregir, para ajustar, pero el hecho de enfrentarte a la posibilidad de crear, de hacer, y esto lo quiero llevar a la escena cotidiana de cualquier individuo, el levantarte y abordar la vida de una manera, tiene que darte las herramientas y las posibilidades de hablarte bien. Y decirte, ok, lo he asumido. Entonces, a eso me he dedicado. Y ha tenido esas vertientes, esas aplicaciones, digamos, en diferentes mundos. Para nadie es un secreto que eres hijo de quien eres hijo, tal vez más que un hombre en una institución. Como decían, ves que uno siente que no tiene nombre sino marca. Exactamente, es un brand. Sí, maravilloso. Y desde que naces tienes también eso, uno sin quererlo, tiene eso, llega con eso. Claro, claro. ¿Cómo es, y aquí viene como una tal vez de las grandes inquietudes que tenía justamente, pues, por los temas que abordamos acá, ¿cómo es nacer y crecer con esa marca? ¿Cómo es nacer y crecer con esa analogía que se hace con los zapatos, no? ¿Cómo es? Uno se acerca, uno se aleja, o sea, ¿cómo fue para ti? Porque vemos que además muchos tratan de seguir los pasos como, casi como si fuera una necesidad, ¿no? En tu caso además es el mismo, tú eres el nombre, además. El nombre y en medios además pues muy similares. Claro, ¿cómo recuerdas la primera vez en la que de alguna forma concientizas lo que es ese Papa para, lo que significa para el país, lo que es esa marca? Hay varias cosas. Voy a arrancar por el final. Eso estuvo siempre presente, por lo que representaba, por lo que mi padre representaba. Representa, pero en ese momento, cuando me llevas a ese instante, muy temprano, muy temprano entendías que había una figura paterna que representaba muchas cosas en el ámbito público. Eso se entiende rápido y los niños entendemos eso rápido, porque en el constructo del héroe, el padre en los inicios de la vida es tu héroe, tú lo eres para tu hijo. Entonces, interpreta rápidamente y cada niño verá la afinidad que toma de esa figura emblemática de su padre, o por su cercanía, o por su solemnidad, o por su fuerza, o por su impacto, o por lo que representa. Cada uno lo sabrá identificar en este momento. Entonces, eso sucede rápido, te das cuenta que existe una figura con tu vínculo más íntimo que te ha dado la vida y que representa cosas de gran calibre en tu territorio. Entonces eso es rápido. El lío es el siguiente, el que tú dices, ok, claro, cuando naces con esa marca, entonces, ¿cómo? Y eso lo va aprendiendo uno después, con muchos años, vas entendiendo que esa no es una decisión que tomas tú, la nominalidad no la tomas tú. Tú no te nombraste a ti, ¿verdad? Entonces, entender, ok, yo tengo este nombre y va a haber una asociación inminente, pero con los años vas entendiendo que todos los individuos todos y cada uno de los individuos somos diferentes así el mundo exterior que muchas veces se circuta no conmigo entiendes en general trate de empaquetar te siempre uniformarte para responder las inquietudes los temores que ese mundo exterior tiene con respecto a los demás. Entonces te empaquetan. Y cuando tienen herramientas fáciles de empaquetar, pues es un bocato di cardenale. Claro. Esto es fácil, esto es así, así, y después viene la vara de la comparación inmediata. Pero tú vas entendiendo que los individuos todos somos diferentes. Venimos a cosas distintas. Y en la trascendencia de la vida después fui entendiendo que el propósito que debemos tener es parecernos a nosotros mismos, que es una de las cosas de mayor dificultad. Porque cuando nacemos, tomamos alguna ruta de acción que lo que nos hacen en el camino del aprendizaje, en ese viaje del héroe, es dejarnos de parecer a nosotros mismos. Para aprender, seguramente. Para comprender, ojalá. Pero nos vamos alejando, ¿sabes? Cuando un día haces conciencia, dices, que creo que hay que hacerlo en determinado momento. ¿Qué tanto me parezco a mí? ¿Y qué tanto dejé de parecerme a mí? Cuando encuentras que te estás pareciendo a ti, yo creo que viene un sentido de la armonía en la que eso, me preguntas, empieza a pasar a un plano lateral. Porque hay un momento en el que pesa. En el que estás buscando tu espacio y tienes un bloque. Ese es el momento, porque todo lo que me estás diciendo es sumamente racional, viene de muchos años claramente de observación y de entendimiento. Pero ¿cómo es ese bloque? ¿Cómo es intentar salir de ese bloque? Hay árboles hermosos. Yo creo que tú tienes, por tu amor hacia la naturaleza, una representación bella de tus árboles. Creo que en tus viajes, en tus paseos, tu mirada se va a los árboles. Hay árboles hermosos. El árbol en la simbología de todo en la vida es una figura muy especial. Por sus raíces, por sus troncos, por sus ramas, por sus hojas, por sus frutos. Entonces hay árboles que te protegen y que te dan sombra, ¿verdad? que te protegen y que te dan sombra, ¿verdad? Pero hay árboles que algunas veces abrigan y otras pueden dejarte en un lugar que de la sombra pase la oscuridad, ¿verdad? Entonces, yo te respondería con ese símbolo. Pero los árboles necesitan cambiar sus hojas también ¿entiendes? entonces es una raíz hermosa, fuerte profunda, loable para exaltar, para ver pero que te hace entender que en el jardín también hay posibilidades de que otros arbustos si lo quieres llamar así crezcan. Entonces, cada árbol tiene su tierra y debemos aprender a convivir con los árboles que tienen diferentes magnitudes, no por ello todos son milenarios. Entonces, esa es una representación de eso, yo creo que hay que entender que esos nombres, esas marcas, para ponerlo en un tema mucho más pragmático y práctico, son un árbol. Apreciarlo con amor, con cariño, con afecto, con respeto, con dignificación de lo que eso significa. Entender cuáles son las líneas sutiles de esa relación, con esa nominalidad, con esa marca, con ese árbol. Y entender que tú también eres un árbol. Y que necesitas que tus raíces crezcan para que tus troncos sean sólidos también. Tu propio espacio. Entonces, es una tarea doble.. Entonces, es una tarea doble. Para responderte es una tarea doble. Que en ese tránsito tienes unas confrontaciones internas brutales. Porque requiere madurez, requiere compasión con uno mismo, requiere aceptación, entendimiento, sobre todo cuando los ruidos externos aparecen. La deslegitimación, el desconocimiento. Hay unos factores que empiezan a jugar mucho y que pesan, Juan Pablo. Pesan no acá, pesan acá. O sea, si ya es difícil buscar una identidad como debe ser yo te explico que mi papá también es muy personaje diferente en magnitud por supuesto pero a su manera muy personaje y muy centro de atención siempre y yo recuerdo sentir ese peso recuerdo sentir el peso de verlo a él desenvolverse en una reunión y decir como uff yo no sé si pueda y también yo pasé por momentos de es mi héroe es mi villano favorito total, claro me quiero ser igual a él de pronto no llano favorito. Total, claro. Me quiero ser igual a él. De pronto no. De pronto no. Pero hay una cosa muy bella, Juan. Eso es para ti. Porque creo que la vida es para uno. Cuando logras acallar el ruido de las percepciones y de los juicios exteriores, la vida es contigo. Y encontrar eso que tú estás escribiendo es decir, ok, claro, acá crecemos, nos parecemos, nos unimos, respetamos nuestro vínculo y después es evidente que hayan diferencias. Entonces cuando los maestros, cuando tú dibujas a un maestro que puedes decir, me ha enseñado a ser muchas cosas que soy y a no ser muchas cosas que no quiero ser eso no significa disparar ni adular ¿me entiendes? el sentido del amor profundo es saber cuánto exaltas valoras avivas y cuánto exaltas, valoras, avivas y cuánto haces distancia de cosas en las que no, en todo. Entonces, eso lo sublima mucho, eso lo sublima. Pero sí, es tormentoso por momentos porque cuando estás empezando a buscar tu vida, a buscar tu espacio a crearte algo pues para nadie es cómodo que aparezca desde afuera la unificación tienes que hacerlo doble ya hay un camino trazado tienes que hacerlo doble yo recuerdo que muy amablemente algún día además como dice uno se va y se mete en la cocina. ¿Sí me entiendes? Va y se mete en la cocina y abre la nevera. Bueno, yo recuerdo que... Porque está en la publicidad, está todo bien, ¿no? Y después pasa a la revista, revista Loft, y todo bien. Un ejercicio... La Loft, claro. Entonces, dirigiendo la rev revista pues claro, sigue siendo un espacio donde no hay ah ok, están apareciendo cosas normales también yo recuerdo que a mi muy amablemente me llama algún día Julio Sánchez y me hace esa hermosa invitación a acompañarle a ser parte de su equipo de trabajo para hacer el programa de la tarde de la W y entonces me dijo Yamir y entonces como quieres que pues muy amablemente te nombramos así y me ocurrió decirle yo te puedo pedir un favor con mucho pues respeto sobre todo por su generosidad y le dije si pudiéramos poner en la promoción del programa Yamida Matserna pues me parecería lindo y él lo hizo el poder de la palabra es fuerte la palabra tiene un poder muy importante en ti y por supuesto una caja de resonancia hacia el mundo eso me sonó bien a mí porque me sonó que era la posibilidad de ir al encuentro con la armonía y el equilibrio de tus fuentes. Eso salió lindo. Yo ahí sentí que de cierta manera, si la cosa salía bien, pues también estaba haciendo un reconocimiento a la presencia del yin y el yang. Entonces salió bien, salió bonito, y yo creo que ahí ha quedado ese serna por ahí como un día hace muchos años ah no, pero ya me da más serna es un homenaje también a la madre si, por supuesto yo creo que yo creo que eso es importante hacerlo nosotros tenemos que dignificar mucho los vínculos Juan una cosa son las relaciones Por eso es importante hacerlo. Nosotros tenemos que dignificar mucho los vínculos. Juan, una cosa son las relaciones. Otra cosa son los vínculos. Las relaciones pueden no ser buenas. No lo digo, no lo estoy citando de manera personal, en general. Las relaciones pueden no ser buenas. Pero los vínculos tienes que tenerlos dignificados. Qué gran concepto, nunca lo había pensado. En la medida que yo dignifico el vínculo con mi madre, con mi padre, que es el vínculo primario, después la relación puede tener los avatares que tengas. Puede ser buena, puede ser regular, puede ser mala. Las relaciones. Y hay cosas que no cambian en las relaciones. Yo tengo la fortuna de tener una extraordinaria relación con mis dos padres. Sana, bella, constructiva, amable, profunda. Eso no quiere decir que no hayan disentimientos y los ha habido fuertes. Pues, pero con el ánimo de la construcción, de la personalidad, al cabo. Pero el vínculo es lo que debe estar sano, para nosotros estar sanos. ¿Cómo se tiene, no es tu caso, pero cómo piensas que se puede tener una relación no tan buena y un vínculo sano? Preguntando para un amigo. Asking for a friend. Hay ciertos permisos literarios que utilizamos. Mira, yo creo que ese es un reto. Ese es un reto. Pero yo creería que comprendiendo, comprendiendo qué te pertenece y qué no te pertenece, moderando tus expectativas a través de la templanza. Espera, moderando tus expectativas a través de la templanza. Sí, yo creo que hay que tener templanza para entender, ok, esto me pertenece y esto no. O sea, esto lo puedo cambiar y esto no. Exacto, hay cosas que son de una manera y hay que entender comprender por qué son de esa manera ¿me explico? dejando de culpar yo creo que eso te hace entender que en el ciclo de la vida hay cosas que son de una forma porque el ciclo cósm vida hay cosas que son de una forma porque el ciclo cósmico también es así esto es así no puedo pretender que eso se modifique a mi favor porque los hombres entramos en una lucha permanente por tratar de modificar cosas que son inmodificables y eso es donde, ahí es donde crece el dolor ahí es donde se alimenta la rabia ahí es donde aparece la frustración ahí es donde uno empieza a reventarse por dentro a reventarse por dentro en su mente y en su corazón yo he tenido las dos reventadas mente y corazón claro es normal dime la de la mente porque la del corazón vamos a entrar después dos reventadas. Mente y corazón. Claro. Es normal. Dímela de la mente porque la del corazón vamos a entrar después. Sí. Pero ¿cuál fue la de la mente? Me costó trabajo callar la mente por mucho tiempo. ¿Cuántas voces hay en tu mente? Bueno, mucha verdad. Y hay momentos de la vida en que te conectas con las voces que insisten en tu dolor. El pasado. Claro. Que te dicen, ejemplo en esto. Usted no lo va a lograr. Mire ese cuento. ¿Está viendo? ¿Para qué hizo eso? Imbécil. Qué bruto. Qué mal tan grande. ¿Se da cuenta lo que está haciendo? ¿Sabes? Todas esas voces generan un estado de esquizofrenia mental en la que se van apoderando del control de tus emociones. Y tus emociones empiezan a vibrar en pasiones bajitas. ¿Sabes. Porque la mente está reventada por dentro, enviándote y justificándose en una cantidad de mensajes que te están lastimando. Y va logrando ese objetivo de lastimarte. Nosotros nos lastimamos mucho. Y cuando construyes desde un mundo lastimero, desde el dolor y la rabia, eso es peligroso. Eso es peligroso. Porque tus movilizaciones vienen cargadas de otras cosas que no son sanas para ti. Y que algún día, te dicen, oye, acá está el resultado de eso y si en ese momento te detienes a ver cuánto era cierto es como con las preocupaciones Juanito cuántas de las cosas que a un individuo le preocupan suceden o no suceden yo te garantizo porque la ciencia además ha sido muy juiciosa en eso, la gran mayoría de las cosas que nos preocupan nunca sucedieron. Así es, tal cual. Creo que lo habíamos tocado tú y yo. Tal cual, así es. Entonces, esas voces interiores ya te sumergieron en un mundo. Muy complejo. Y si en ese instante, cuando eso va generando esa tensión interna, tú no tienes o las herramientas, o la compañía, o la fuerza interior, o tu conexión espiritual, llámalo como quieras, o tu conexión espiritual, llámalo como quieras, para hacer una terapia de choque inmediata interna, eso termina mal. ¿Ha podido terminar mal para ti en algún momento? Sé que puede ser para cualquiera. Sí, pero no, eso te diría que no. Te diría que ahí me siento un ser muy afortunado, muy afortunado porque tuve hombros. ¿Para llorar? Sí, tuve hombros. Yo soy un llorón de primera categoría. ¿Y tu papá? Mi padre es un hombre supremamente sensible, lo que pasa es que es un hombre fuerte, ¿verdad? Claro. Desde el punto de vista de su oficio vas a ver un hombre con esa energía de león, tremenda. ¿Ese hombre del público se parece al hombre privado? Él ha tenido su vida privada muy protegida. Nunca le vas a oír hablar de su vida privada. Pero es un hombre muy sensible, supremamente sensible. Claro que llora. Es un hombre muy sensible, por supuesto. Los Amat somos sensibles, y los Cerna también. Sí, mi padre es un hombre sensible. ¿Tuvieron espacio? ¿Era permitido en tu hogar, en tu crecimiento? ¿Era algo, hablar de las emociones, mostrarse vulnerable, era algo que en tu casaimiento era algo hablar las emociones mostrarse vulnerable era algo que en tu casa era normal yo vengo de un matrimonio que se separa muy temprano los padres han sido separados muy temprano porque me tenías unos cuatro pequeños yo no tengo mucha memoria de la casa de Full House, ¿me entiendes? ¿Tienes hermanos? Sí, una hermana mayor. Entonces, digamos que no siento que era una decisión de un modelo de educación, pero por supuesto lo ha permitido, porque mi madre que lideró muchos años Porque mi madre, que lideró muchos años ese proceso del nido, como pasa cuando hay separaciones, niños van con mamá, claro que se permitía llorar. Era supremamente válido y además plausible. Mi abuelo materno, un hombre tremendamente especial, brutalmente especial, una maravilla de ser. Ese sí era llorón. Ponía tangos, bailaba y lloraba. O sea, argentino de alma, nostalgia. Entonces, para mí era muy usual llorar, era muy permitido llorar. Entonces, ese fue un mecanismo que me ayudó muchísimo en los momentos difíciles hacer catarsis, se podía llorar. Mencionaste terapia de choque, o sea nosotros trabajamos de la mano con Celia, Celia es una plataforma para el cuidado de la salud mental. Muchos de los datos a mí me llaman poderosamente la atención entre ellos y es que todavía hoy en día el 75% de sus consultas son de mujeres, no de hombres. Entonces, antes mencionaste terapia de choque. ¿Por qué terapia de choque? Porque yo creo que hay cosas que hay que hacerle frente en los momentos correctos. Mira que si me estoy viendo por las ramitas, tú me dices, no es deliberado. Esto es para esto. Yo creo que una de las situaciones más complejas para el hombre administrar es el tiempo. Como no se puede agarrar ni comprar ni permutar. Entonces, con el tiempo hay distorsiones. ¿A qué me refiero con esto? La mayoría de las veces le damos largas a muchas cosas. ¿Cuántas veces tú y yo nos hemos ido más tarde de una fiesta de lo que deberíamos? Por ejemplo. Hoy en día ya no, ya no voy a la fiesta. No, no, claro, por supuesto. En su momento sí, muchas veces. Es un ejemplo. O por ejemplo hoy en día ya no voy a la fiesta claro, por supuesto es un ejemplo cuántas veces te quedaste por lo que fuese un poquito más en el trabajo que no te motivaba generalmente extendemos las cosas un poquito más la relación crotesia feliz y entonces eso darle largas al tiempo es complejo, porque las cosas que suceden en los espacios de extra difícilmente son buenas cuando digo el choque es estar muy atentos y muy despiertos a saber cuáles son los límites en los que tienes que tener control de las situaciones y de las cosas. Entonces yo creo que hay un momento en el que hay que decir, ok, esto necesita control. Yo no puedo, ok, como tú lo dices. ¿A quién debo recurrir para? ¿Cuáles son las herramientas que tengo cerca para? ¿A quién debo recurrir para? ¿Cuáles son las herramientas que tengo cerca para? Porque hay unas líneas que en un instante se pierden. Las personas que toman decisiones con su vida, por ejemplo, de terminar su vida. Yo creo que es una línea delgada, una situación muy profunda yo no sé si muchas de esas vidas pudiesen haberse salvado porque también hay una relación con el destino pero lo que sí creo es que tomar las decisiones a tiempo en todo puede contribuir con la sanidad de las mismas y los resultados de las mismas. ¿Me explico? Absolutamente. Entonces me refería a eso. Yo cuando tenía esas tormentas normales, cuando estás construyendo tu camino, Total. Cuando estás construyendo tu camino, cuando hay soledad en ti, cuando hay emociones desequilibradas, cuando hay presión. Por ejemplo, mi abuelo fue un ser muy especial. hermano en eso claro porque los papás estaban suyo la pasta dando sus batallas me entiendes es que ojo uno no puede confundir la ausencia con el abandono también son conceptos diferentes y tendemos a unificarlos entonces si padre está atendiendo sus guerras porque era un guerrero en su tránsito y mamá está cumpliendo con la función que tiene que cumplir. Estamos hablando entre hombres. Yo tuve la gran fortuna de que ahí Rafael extendió, no la mano, parecía un pulpo. Yo creo que tenía ocho. Con fuerza, con mucha determinación, pero con un profundo amor. Eso era una bocanada de inspiración. Rafael Cerna, todo bueno. Sí, sí, sí. Y lo hacía, lo hizo siempre, creo que con todos los seres que conoció. Entonces eso fue... Muy bello. Porque eso te afianza. La presencia. Eso sirvió para cuando estás lejos de ti, mirar y decir, ah, allá queda un chico con confianza, voy a ir por él. No queda un chico en abandono. sea que podría haber ausencia, pero no abandono. No, yo no. Yo creo que son conceptos muy diferentes. Me parece brillante. Muy diferentes. Una cosa es que alguien no esté, por alguna razón. Y otra cosa es el abandono. Y hay que saberlo tener claro. Porque también cuando estás desvalido, cuando estás solo, cuando necesitas un beso, cuando necesitas... Es humano confundir esos dos conceptos. Es muy humano confundirlo. Pero no es sano no ahondar en ellos para dejarlo cada uno en su cajón correcto. Y eso tiene que ver con lo que hablamos hace un rato. Ahí dignificas tus vínculos. O los alivias o les das la palabra correcta. ¿Me entiendes? Porque yo creo que debemos tener una terminología correcta para generar los diagnósticos internos. ¿Sufriste abandono? No. ¿Hubo ausencia? Sí. una terminología correcta para generar los diagnósticos internos. ¿Sufriste abandono? No. ¿Hubo ausencia? Sí. ¿Me entiendes? Es es diferente. Y ahí respiras. Entonces en eso, en eso pues esa red de apoyo funcionó bien. El pulpo me permitía, permitía el pulpo de aire. Y votar, y votar, y votar, y votar, y votar el pulpo de aire. Pero qué belleza que hayas tenido el espacio además en donde te hayan dado la confianza de poder votar. Yo tuve un padre también que era sensible pero pequeño una pequeña anécdota y es que era un ser sumamente pragmático con la muerte y es una enseñanza que me dejó muy válida y era como es lo único seguro que tenemos porque hay tanto misterio alrededor de la muerte pero una vez cuando yo tenía 18 años que trabajaba en una discoteca en España, en Valencia yo me crié allá uno de mis compañeros de trabajo 18 años, que trabajaba en una discoteca en España, en Valencia, yo me crié allá, uno de mis compañeros de trabajo se murió de una forma muy injusta, muy boba, un tipo de estos que son luz y saliendo del trabajo nos íbamos siempre como a un sitio en la playa a recibir el amanecer, o sea era de una felicidad aparte y de un bonito y saliendo de ese lugar, entrando a su casa, entrando la moto a su casa, un conductor borracho se sube al andén y lo mata. Y si bien yo había ya tenido un impacto de muerte en mi familia, es que mi tío Oscar murió en el avión de Avianca, en la bomba del avión de Avianca. Yo era pequeño, entonces acá ya teniendo 18, 19 años, me dio durísimo, me dio durísimo, durísimo, porque era como la primera vez que realmente entendía lo que era la muerte y cómo te ibas. Y tres días me dejó mi papá que tuviera duelo. Y el tercer día me dijo, ya, se acabó, ya, no hay espacio para nada más. Me acuerdo el momento en el que me lo dijo. Me dijo, argentino, me separá, todos nos vamos a morir. La vida es una regla, la gente se va acá, se va acá, tu amigo se fue acá, ya se acabó. morir. La vida es una regla, la gente se va acá, se va acá, tu amigo se fue acá, ya se acabó. Te oigo y oigo como este espacio de poder transitar las emociones y de poder... Claro, y fíjate que aún así me quedó la colita, no alcancé. ¿Cómo así? Aún teniendo la posibilidad de liberar, hacer catarsis, estar acompañado, ya había algo que se había empezado a instalar en mi sistema y se rompió. Que es cuando sufro el infarto yo leí Juan por cuatro meses todos los días de ese periodo me levanté y leía ¿qué pasó? infarto agudo en miocardio, se le practicó angioplastia al corazón tiene hasta en coronario la base proximal del corazón decía puta madre! ¿Qué pasó? Y lo leí tanto y tanto y tanto y tanto que fue como un impulso a un viaje interior para comprender qué había pasado. Yo creo, y entiendo a quien no lo comparta, por supuesto, y lo respeto de manera profunda y sublime, yo creo que las enfermedades tienen una relación profunda con las emociones. ¿Verdad? Se somatizan. Y en ese viaje me di cuenta que había emociones allí que habían dejado su huella. Una buena amiga me llamó en mi cama recuperándome y me dijo, Yami, tú sabías que se iba a pasar. Yo creo que fue el mensaje de aliento más bello que recibí. Porque yo sabía que eso iba a pasar. ¿Lo sabías? Porque yo oigo las voces interiores. Y después trate de entender qué era. Y yo quiero aprovechar este espacio para hacerte una pregunta a ti y a todos. ¿Qué bombea tu corazón? Pregúntate eso en honor a nuestra amistad. ¿Qué bombea tu corazón? En la representación simbólica o patológica o como lo quieras llevar. Y yo también lo pediría. Paremos un segundo a revisar qué está bombeando nuestro corazón. Y sin miedo, si alguien ha sentido que su corazón ha bombeado envidia, rabia, frustración, angustia, temor, miedo, perturbación. ¿Cuántas de esas características de lo que tu corazón bombea son tuyas? ¿Y cuántas no? Yo creo que la energía del ADN tiene un peso y probablemente bombeamos dolores propios, retomamos dolores ajenos en el linaje paterno o materno, pero nosotros estamos hablando de un ejercicio que es para hombres, es probable que hayamos bombeado el dolor de muchas de nuestras generaciones. Muy científicamente comprobado. Es probable que arrastremos con una serie de dolores que no se han suturado. Entonces esos episodios te abren una ventana muy bella de entender claro, tuve la fortuna de respirar al día siguiente milagrosamente quizá para esto quizá para ir abrazar tener compasión hacia sí mismo terminar de suturar y poder ver el amor instalado en los ojos y en la figura de mi hijo, sanándonos a todos para atrás también. Yo quisiera que todos, todos, sintamos que no es tan grave nada, que nada es tan importante, que le damos sobreimportancia a cosas que no las tienen, que el éxito no es tan importante en la vida, no el tipo de éxito que nos han mostrado, que las cosas que se tocan no son las que perduran hay un momento que me marcó mucho cuando me fui a vivir a Estados Unidos y es que justo antes de estaba reunido tomando un café con dos amigos productores y yo nunca había oído el siguiente término y es que ellos empezaron a hablar de otras personas y alguien dijo ¿Sabes cuánto vale? Yo nunca había oído el término y esperando de una forma muy naif tal vez como que íbamos a hablar de cosas espirituales, o como que no sabía. Dijo, no, he is worth... Te mandó una cifra. 40 millones de dólares. Quedé... No, no, lo siento, igual. Me impresionó tanto, porque entendí que era todo un constructo social alrededor de un valor, como decías antes, de lo que supuestamente es el éxito. O sea, ¿qué es ese éxito? ¿Eso es un valor? ¿Tienes que colgarte una etiqueta, un número? Me niego, hermano, me niego. ¿Tú sabes cuánto pesa eso? Me niego. Y como eso se volvió, se convirtió en una normalización de la conducta. ¿Sabes cuánto pesa eso? Entra por acá, entra por acá, entra por acá. ¿Sabes lo que estamos creando ahí? Estamos midiendo a los seres humanos por lo que valen. ¿Cuál es el valor del ser humano? La reconstrucción de la pirámide de los valores. Se reventó todo. Nos guiamos por el mundo exterior y el mundo interior, ¿dónde está? ¿Cuánta riqueza? La riqueza que necesitamos en la interior. Claro que somos amigos de que ojalá vivamos en un mundo próspero todos, por supuesto. Pero que el dinero sea una herramienta para goces. Totalmente. Lo demás es una aberración, Juan. Entonces, hay que mirar hacia adentro. Tú eres un hombre feliz. Como diría mi hijo, hay días que sí y hay días que no. Como tiene que ser. Pero si en el resumen de tus días te diste cuenta que fuiste más horas feliz que infeliz. Absolutamente. Pues así es. Absolutamente. Gracias. No, a ti. A ti. Luz y amor siempre. A ti. Luz y amor siempre. más de 350 profesionales en salud mental y bienestar emocional que pueden guiarte y apoyarte en cada paso del camino. Además te ofrece recursos gratuitos como meditaciones guiadas, ejercicios de respiración, diarios de emociones y mucho más. Visita celia.com o descárgate la app y encuentra el camino hacia una vida más feliz y conectada.